El Tetris

Los hechosLa llegada | Acto 2
El interior del barrio daba aún más miedo que la carretera asesina. Parece como si alguien hubiera jugado a los dados con las manzanas del barrio y las hubiera dejado esparcidas de cualquier manera. Recuerda a Tokio, pero en cutre. Encontrar la casa entre aquellas callejuelas de doble dirección por las que sólo cabe un Seat Panda fue sencillo, lo complicado era encontrar aparcamiento entre aquel Tetris autista.

Aún así, tuvimos suerte y, tras un par de encontronazos con otros coches participantes en aquel circuito de Blur, conseguimos llegar de nuevo a la carretera nacional, atestada de coches aparcados que aprovechaban hasta el más mínimo resquicio libre para meter el culo.

Tras aparcar, tardamos diez minutos en llegar a pie, 32ºC, a la maravillosa casita de diseño.

Punto de no retorno

AludidosParticipantes al evento. Los demás seréis exonerados de inmediato ...
Vamos a empezar a entrar en harina. Como se que no te gusta embadurnarte en la cocina, te doy un consejo, que esos siempre son gratis. Busca alguna otra cosa que hacer, ¡vete!, no me importa, en serio, que al final me vas a poner en un compromiso...

¿qué quieres hacer? - No puedo seguir ... | Seguir leyendo ...